Ana Barceló, la
consellera de Sanitat de la Generalitat Valenciana ha comparecido hoy viernes
22 de noviembre en una rueda de prensa para analizar los resultados de la lista
de espera quirúrgica en la Comunitat Valenciana.
Unos resultados
que fueron publicados el miércoles y ampliamente difundidos por la prensa
local.
LA VALORACION DE LA CONSELLERA BARCELÓ :
“Es
obvio que NO estamos satisfechos con esos datos”.
La consellera
reconoce abiertamente que se trata de un mal dato que no esperaban.
Y es lógico : la Lista de Espera Quirúrgica al
cierre de 30 de septiembre arroja una demora media de 109 días para la llamada “demora estructural” (la que depende
directamente de la actividad de la Consellería) y hasta 133 días para la llamada “demora total” (la que incluye todos los
factores exógenos).
La consellera ha
querido recalcar, no obstante, que ”se trata de las demoras para las
intervenciones quirúrgicas programadas y no tiene en cuenta las urgencias
sobrevenidas, que no tienen demora alguna”.
Se trata de un
mal dato sin paliativos : es una
demora muy grande y además, lo que todavía es peor, significa un claro
empeoramiento respecto a la situación de hace un año, en Septiembre 2018.
Un empeoramiento
de alrededor del 10%, tanto para la
demora estructural como la total.
¿LAS CAUSAS?
La consellera ha
identificado varias de las principales causas de los malos datos del corte
de septiembre.
En primer lugar,
la “estacionalidad”.
Efectivamente,
el verano es muy mala época para la lista de espera debido a que disminuye la
actividad en quirófanos por la falta de personal. También los sanitarios se van
de vacaciones y también les gusta irse de vacaciones en verano, como todo el
mundo.
A lo largo de
toda la serie histórica el trimestre Junio-Agosto-Septiembre es el que arroja
los peores resultados del año…pero eso también sucedía en 2018.
Y septiembre
2019 ha sido bastante peor que septiembre 2018.
En segundo
lugar, la consellera ha aducido el “desistimiento
voluntario”.
Se trata de
aquellos pacientes que a los que se les asigna una fecha concreta durante el
verano para su intervención quirúrgica…y el paciente la rechaza. Prefiere demorar voluntariamente su
intervención.
Esa
circunstancia se agudiza en el caso de las derivaciones quirúrgicas a la
sanidad privada, aunque no exclusivamente. En cualquier caso, los pacientes
también quieren irse de vacaciones.
Puede parecer
anecdótico pero no lo es. En 2019, el desistimiento voluntario ha alcanzado
nada menos que el 64% del total de
las derivaciones a la privada a causa del Plan de Choque.
Finalmente y
solo a preguntas de una de las periodistas presentes, la consellera ha
sobrevolado la que puede ser otra de las causas de los malos resultados de
septiembre : los problemas de deficiente gestión de las listas de espera
y la actividad de quirófanos.
Sin reconocer
abiertamente que hay o puede haber habido problemas de gestión de recursos sí
que ha informado que desde la consellería se está haciendo un análisis
detallado “centro por centro”, para
detectar y diagnosticar posibles anomalías…”si las hubiera”.
Es claro que las
enormes diferencias entre los diferentes hospitales merecen como mínimo una
ojeada muy seria a la eficiencia de los equipos directivos y el rendimiento de facultativos
de algunos de ellos.
Pero lo que la
consellera Barceló no ha mencionado en ningún momento como una de las causas de
los malos resultados ha sido la evidente “huelga de celo” de cirujanos y
anestesistas con motivo de las difíciles negociaciones entre la administración
y los sindicatos médicos corporativos, muy enconadas en el caso de los
traumatólogos.
El Plan de
Autoconcierto inicial de la Consellería (retribuir a los cirujanos de la
sanidad pública para que operaran tambíen por las tardes) tropezó con la
negativa frontal de los facultativos por lo que consideraron no solo una escasa
remuneración adicional sino un sistema agobiante de monitorización y control de
su trabajo.
Las
negociaciones tuvieron altibajos y duraron muchos meses, durante los que el
descenso de la actividad quirúrgica fue muy notable. Y no solo de la actividad
quirúrgica relacionada con el programa de Autoconcierto, sino de la actividad
global.
Sólo durante la
primavera comenzó a normalizarse la situación, pero la gran demora acumulada
alcanzó al verano y recién a partir de septiembre se ha ido recuperando paulatinamente.
Buena muestra de
ello son los datos que ha aportado la consellera Barceló respecto a resultados
registrados con posterioridad al corte de septiembre, concretamente al 30 de
octubre e incluso los recientísimos del 15 de noviembre.
Según esta
información, la demora quirúrgica ha mejorado radicalmente en tan solo los 45
días transcurridos desde el corte de septiembre.
De hecho, la
mejora es tan sensible como que alcanza una disminución de la demora de entre
el 10,5 y el 13,8% para la demora total y la estructural respectivamente.
Es evidente que
el Plan de Autoconcierto finalmente ha echado a rodar satisfactoriamente, tras
conseguirse los necesarios consensos entre la Administración sanitaria y la
representación de los facultativos sanitarios.
¿Y AHORA QUÉ PARA EL FUTURO?
La consellera
Barceló se ha mostrado contundente y plenamente confiada en el próximo futuro.
Y no solo por la
buena tendencia que muestran los datos posteriores al 30 de septiembre, que de
por sí ya son esperanzadores.
Barceló ha
recordado el Plan de mejora de la demora quirúrgica que fue anunciado hace
pocas semanas y que comenzará en un par de meses o antes, si es posible.
Se trata de un
plan muy ambicioso que contempla todos los escenarios y que tiene un fuerte
respaldo financiero incluído en los presupuestos de la Generalitat para 2020.
. Nada menos que 16 millones de euros
adicionales para el plan de Autoconcierto para activar los quirófanos por las
tardes a pleno rendimiento.
. 5,8 millones para contratar 128
sanitarios adicionales
. 14 millones adicionales para el Plan
de choque de derivaciones quirúrgicas a la sanidad privada cuando sea
necesario.
Parece creíble.
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